Cómo cuidar nuestros talones

Cómo cuidar nuestros talones

Mis talones me traen de cabeza. Tengo que cuidarlos al máximo para que no se agrieten! Y es que si lo hacen, no solo resulta antiestético, sino muy doloroso.

Quizás porque no solemos llevar los pies a la vista, salvo en verano, o porque es una zona fácil de ocultar, nos preocupamos menos de su aspecto y bienestar. Debemos prestar atención a nuestros pies en general y talones en particular en cualquier época del año. Con dedicarles unos minutos al día debería ser suficiente, si somos constantes, para que estén sanos y bellos.

Lo fundamental es asearlos e hidratarlos, aunque también debemos poner atención en el tipo de calzado que utilizamos.

Últimamente proliferan los productos dedicados a terminar con las durezas en los talones y a embellecer los pies. Si utilizamos uno de estos productos, deberemos ser cuidadosos con su limpieza y mantenimiento, ya que los pies son fuente de entrada de numerosas infecciones, como los hongos.

Un buen punto de partida puede ser acudir a un especialista que nos ayude a dejar nuestros pies en buen estado, y empezar a cuidarlos por nuestra cuenta a partir de ahí.

Consejos para unos pies saludables

Si sufrimos dolencias en nuestros pies, deberemos optar por un calzado cómodo y amplio, y evitar los tacones, que tampoco son recomendables para una buena postura. En verano, el uso de sandalias empeora el estado de nuestros talones al golpear éstas contra el talón al caminar.

Los calcetines de algodón son los más recomendables para evitar la sudoración y permitir una mejor transpiración.

Si andas descalza, asegúrate de hacerlo sobre superficies limpias y blandas, como la arena de la playa.

Un buen baño de agua tibia en el que sumergir los pies mientras vemos una película o leemos, por ejemplo, también producirá en efecto calmante. Podemos hervir manzanilla o caléndula para potenciar la acción del baño.

Después del baño, no olvidemos hidratarnos bien con una buena crema, aceite de oliva, sérum, vaselina, exfoliante… masajeando todo el pie, aunque aplicando una mayor cantidad en los talones. También es recomendable aplicar la solución hidratante antes de irnos a dormir, y dejarla actuar durante la noche.

Podemos utilizar un aparato eléctrico para eliminar durezas en los talones, pero deberemos ser cuidados en cuanto a su utilización, ya que un exceso  o mal uso puede producir heridas y males mayores.

Y por supuesto, no nos olvidemos de limpiar bien nuestros pies, preferiblemente aplicando un jabón específico para pieles secas, y secarlos a fondo, si es posible al aire.